Lo mejor es evitar los meses de verano ( de diciembre a marzo), no sólo para no sufrir las altas temperaturas y los mosquitos, sino también porque precisamente en verano es cuando más llueve. Nuestra recomendación es visitar la zona en los meses de primavera (de septiembre a noviembre), ya que en estas fechas podremos apreciar una gran cantidad de flores y la mayor variedad de aves!

Los Esteros del Iberá o “aguas brillantes” (Y verá) en guaraní , ya que en las noches de luna llena el espejo de agua parece resplandecer en el paisaje, es el área protegida más extensa de la Argentina, el segundo humedal más grande del planeta (12.000 km2) y el hábitat para unas 4000 especies de fauna y flora, lo que constituye el 30% de la biodiversidad del país.

Un estero es una zona pantanosa causada por un suelo de drenaje insuficiente con una alta biodiversidad, compuesto por bañados, cañadas, lagunas y embalsados, lagos someros, pastizales y malezales.

Esteros del Iberá es el lugar perfecto para entrar en contacto con la naturaleza…se pueden realizar avistaje de flora y fauna y estar a un metro de distancia de yacarés, carpinchos, tapires, ciervos, venados, lobitos de río, garzas, chajás, monos aulladores y aves de todo tipo, realizar paseos en bote, safaris fotográficos, salidas en kayak, cabalgatas, senderismo y todo enmarcado en una ruralidad extrema donde la presencia humana se limita a unos pocos lugareños.